Grafeno, el secreto de cómo no quebrarse jamás


Es ya el material de moda en Silicon Valley, se llama grafeno, y en 2004 batió todos los récords, abriéndose paso para convertirse, probablemente, en la clave de la tecnología del siglo XXI. Aunque le ha salido un hijo todavía más duro, el carbino. Y su gran cualidad, la que los hace invencibles a ambos es, sin duda, una de las más valoradas en la actualidad, y de las más importantes cuando emprendemos una tarea a largo plazo, como la de aprobar una oposición: LA RESISTENCIA.

Por eso hemos querido descubrir cuál es su secreto, y aprender de él el arte de no quebrarse jamás, algo que puede resultarnos muy útil, tanto en los estudios, como en la vida. Te avanzamos esta imagen que lo sintetiza y luego vamos punto a punto comentándolo.

  1. El grafeno es todavía más duro que el diamante, lo que quiere decir que no hay otro elemento capaz de rallarlo.

 

Lo que nos enseña, de paso, algo importante: que la dureza depende de nuestra capacidad para no sentirnos afectados por los elementos externos. No quiere decir que no seamos sensibles a lo que nos sucede, pero sí que el exterior no debería modificar sustancialmente nuestra actitud ni nuestros objetivos.

 

  1. El grafeno, es además, un material fino, con una resistencia a la tracción similar a la de la seda de araña, lo que demuestra que delicadeza y resistencia son grandes aliadas.

 

El esmero, la delicadeza y el interés por el trabajo nunca nos harán más débiles, al contrario, poner interés en todo lo que hacemos, dedicarle tiempo e inteligencia, nos fortalece. ¡Qué mejor que saltar con red!

 

  1. El grafeno es un material maleable, lo que significa que se adapta con facilidad a su entorno, adaptando su forma con relativa ductilidad.

Por lo que este elemento viene a confirmar algo que se ha repetido muchas veces, que la capacidad de adaptarnos a los cambios, de amoldarnos a las circunstancias, es una de las claves para resistir por más duro que nos resulte el camino.

  1. El grafeno tiene también similitudes con el cristal. Su capacidad para dejar pasar la luz es una de sus grandes virtudes.

 

La claridad, tanto en las ideas, como en las acciones, y la coherencia a la hora de trabajar es también un pilar que no sólo nos permite alcanzar el éxito, sino lo más importante, mantenerlo.

 

  1. El grafeno puede trabajar sin dificultad al lado de otros elementos. De hecho, algunos de ellos, como la plata, no hacen sino potenciar sus cualidades y convertirlo en un material todavía más resistente.

 

No estamos solos, y pensar que podemos solucionar todo por nuestra cuenta es un error demasiado común. Tenemos que aprender a pedir ayuda siempre que la necesitemos y a elegir a aquellos que pueden apoyarnos mejor, ya sea en función de su conocimiento o de sus posibilidades.

 

Estos son los secretos que esconde el grafeno, y que pueden sernos de utilidad parar resistir cuando las circunstancias no son las más idóneas, pero hay algo más importante que también nos cuenta este material: un mensaje para el futuro.

 

Y es que no debemos olvidar que, aunque hoy sólo un pequeño grupo de personas conoce su existencia, probablemente dentro de unas décadas el grafeno sea tan común para nosotros como el papel o el plástico. Su potencial, es, por tanto, altísimo. Como el nuestro.

 

Conclusión: nunca menosprecies hasta donde puedes llegar, porque a veces es más lejos de lo que imaginas.

 

 

Para suscribirte al blog y recibir notificación de nuevas entradas, mira a pie de página.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *